Presentación de la Exposición “Travesía por el Reyno de los Sueños”

Permítanme antes de presentarles estas obras , agradecer a Lenka Chelen la confianza que ha depositado en mi persona para realizar la curatoría de su obra en esta exposición. Esta gentileza ha significado un gran desafío, pues desde que la he conocido he adquirido un gran admiración por su capacidad creadora , su talento y cualidades humanas plena de gran generosidad y solidaridad.
No puedo pretender posicionar la obra de Lenka como una representante mas del arte Naif ella es una artista extraordinariamente sincera, que pinta para satisfacer una necesidad espiritual provocada por su país natal. Demostrándonos de paso que estamos ante un pintora que se apasiona en su entrega de trasladar al lienzo, transfigurándo líricamente, las costumbres y paisajes. Los pueblos, sus calles, la montaña, el mar, los acontecimientos tradicionales, las festividades populares, lo folklórico, lo religioso y la profundidad de la vida en sus aspectos más esenciales.
Tal vez no sea coincidencia que el hombre, cuando consigue salir de experiencias traumáticas tales como acontecimientos bélicos o represiones sociales, tienda a reparar las secuelas de aquellos hechos, mediante expresiones artísticas de cuyo contenido abstracto se desprende una inseguridad existencial tan tenebrosa y agobiante que quebranta la mirada. Aquellas expresiones se transforman en agresiones visuales que permanecen y se transforman en huellas como si aquello fuera una estrategia de supervivencia.
Como reacción a la deconstruccion de las formas y de entre tanto dolor provocado, nace lo “naif” que  ha sabido alzarse como una revancha sencilla de la alegría haciéndonos olvidar, con sosiego apacible el triste ámbito de nuestra realidad cotidiana. Esa que afuera, asalta por todas partes con ruidos de motores, metrallas de bocinas, poluciones, calentamiento global, etc . Tal vez la verdadera razón del arte Taif sea la necesidad de reencontrarnos con muestra naturaleza ingenua
No es extraño, por consiguiente, que Lenka Chelén practique esta clase de pintura, ni que refleje en ellas su visión del mundo por medio representaciones cándidas y simples. Importantes sucesos de su vida se hayan reunidos en estas obras que hoy tenemos la oportunidad de observar. Aquí no hay teorías artísticas por lo tanto, no busquemos respuestas, disfrutemos de ellas.  La sinceridad es su principal característica y valor definitorio y aunque es evidente que se nos presenta bajo una gran originalidad, ésta no obedece a una búsqueda consciente ni constituye la principal preocupación de Lenka.   
Exponente de una actitud puramente vital, sin haber elaborado una filosofía de su arte ni de sus hallazgos formales. Intuitivamente se ha limitado a asimilar la belleza del mundo y en su misión estas pinturas reinventan historias. Así nace esta “Travesía por el Reyno de los Sueños”, como concepto intuitivo y narrativo, que nos “cuenta” un sugestivo mundo en perpetua fiesta de alegrías, recordando el pasado con mucha ternura. Nos cuenta de una vida poetizada por el recuerdo, convirtiendo sus cuadros en obras de arte que con graciosa solemnidad y sensibilidad en el oficio, se coronan como figuras subyugantes, que hace nacer en nosotros, sus espectadores, una sonrisa de felicidad. 
La pintura para ella fue un regalo de la vida. Su inclinación nació de una extraña mezcla de causalidad y magia, no tiene ninguna escuela pictórica. Es autodidacta. en retratar la realidad, con imágenes de su fantasía. Pinta en forma directa, y NO le teme a los colores. Es  de ese modo, que el origen espontáneo de estas creaciones guardan correspondencia con cualidades que hacen referencia a lo ingenuo e inocente, estimulando al espectador que se coloca ante sus cuadros a despojarse de lo intelectual, porque ella tiene el poder de acercarnos a nuestro mundo particular de ensoñación. Ella logra que cada uno de nosotros se transforme en esa figura apacible que aparece en sus ventanas. 
Esta es una exposición que no pasara desapercibida, en ella esta registrada la historia natural de los niños con la sutileza de quién ha quien ha logrado congeniar la mirada con el mundo. Así estas obras que se nos adelantan como profecías visuales que todos quisiéramos tener, miradas francas de niños que nos miran a los ojos, tal vez buscando respuestas a tantas preguntas que aun después años los mayores aun no se responden, profecías de la mirada,  que Lenka nos propone para convivir en un mundo que preserve, en buena medida, la mirada plástica de los niños. 
Jorge Sacaan

Inauguración Expo Congreso Nacional